“Papá, no lo sabes ahora pero te
estoy viendo.
Estoy
viendo las cosas que haces.
Estoy
mirando cómo tratas a las personas.
La forma
en que me tratas a mí. A mi mamá. A mi hermana.
La forma
en cómo vives tu vida está teniendo un gran impacto en mí.
Cuando me
llegue el momento de escoger una carrera y mantener a mi familia, tu ética en
el trabajo estará en mi mente.
El tiempo
que pasas conmigo, aunque sea haciendo cosas simples, me va a dar un sentido de
seguridad.
Habrá
momentos en mi vida en que tenga que luchar con la integridad y tal vez no sepa
qué hacer. Recordaré cómo elegiste hacer lo que era correcto, aun cuando
pudiste haber hecho lo contrario. Y así como tú tomas decisiones, yo también
las tomaré.
Por favor
no tengas miedo de mostrarme tus fallas, tus errores. Yo aprenderé de
ellos.
Papá,
¿Estás escuchando? Te estoy viendo. Viendo si realmente crees lo que dices
sobre Dios.
Quiero
que me ayudes a mostrarme mi camino, que me enseñes a vivir, pero no de una
forma fácil, sino de la forma correcta.
Así que
te estoy mirando papá. Todos los días. Me estás enseñando cómo vivir, lo sepas
o no”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario