Rhododendron

Rhododendron
Tsutsuji

31 agosto, 2022

1053. Quería gritar. Patricia Benito, española.

Quería gritar.
Gritar y decirte
que siempre supe
que tus demonios jugaban sucio.
 

Que no ganabas,
que me dejaba ganar.


Como una niña pequeña que sabe que no llega al juguete pero no para hasta notar el golpe, esperé el derrumbe.


Necesito que lo sepas: vi tu lado oscuro y, aun así, por un momento,
me quise quedar.

 


 
Nací en una isla (en 1978) y no sé nadar. He vivido en tres ciudades, nueve hogares y alguna casa. Me he enamorado una vez. He bajado corriendo de un tren en llamas y he visto explotar una bomba. No creo en las cosas que duran para siempre. O sí, no lo sé. Las fresas, con leche condensada. Cada cierto tiempo necesito cambiar cosas de sitio, ya sean muebles, personas o toda mi vida. Si no viajo, no puedo respirar. Tengo incontinencia sentiverbal. Me pierdo en cualquier atardecer, a ser posible con mar. Prequiero demasiado rápido y desquiero demasiado lento. No recuerdo la última vez que me dormí pronto. Mido el tiempo en medias cervezas y no hago planes a más de cerveza y media. Lloro en las manifestaciones cuando oigo a Labordeta. Te necesito cerca, pero no encima. Siempre voy con el más débil. No imagino un mundo sin queso, ni sin chocolate. Casi siempre es mejor dar que recibir, y no estoy hablando de sexo; no solo de sexo. La reina de mi casa es una gata coja que no para de ronronear. La empatía debería mover el mundo, no solo el mío.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario